¿LA INVERSIÓN A TRAVÉS DE FONDOS O PRODUCTOS FINANCIEROS DE GESTIÓN PASIVA ES UNA OPCIÓN DE INVERSIÓN?
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Muchas veces hemos escuchado de personas, empresas, inversionistas institucionales que se han hecho ricos o han generado rendimientos extraordinarios en corto tiempo, invirtiendo su dinero a través de los Mercados Financieros. ¿Qué tan cierto puede ser aquello?
Definitivamente es algo cierto, pero tiene sus matices. Seguramente es un porcentaje mínimo en relación al resto de inversiones del sistema. Esto podría darse de dos formas, ya sea que un inversionista con mucha habilitad, conocimiento del mercado y algo de suerte, anticipe y pronostique la evolución del mismo o que conozca información privilegiada que otros inversionistas no, y se anticipe a ejecutar sus inversiones generando beneficio en detrimento de otros.
Pero, ¿qué pasaría si exactamente todo el mercado (todos los inversionistas) actúan de exactamente la misma manera al momento de ejecutar sus inversiones? ¿Pueden existir solo ganadores en el juego?
Seguramente no, ya que, si bien el mercado de valores no es un juego de azar, su funcionamiento y dinamismo tiene base central en las expectativas que tienen sus inversionistas sobre los precios de los activos financieros que forman parte de dicho mercado y, para ello, el componente de análisis financiero (ya sea fundamental o técnico) es la piedra angular que les permite pronosticar la evolución del precio sobre dichos activos financieros. En función de su expectativa de precio los inversionistas, realizan su trabajo con la fiel convicción de: “comprar barato y vender caro” o “de vender caro y comprar barato (para el caso de ventas en corto o shorts).
Entonces, según lo dicho si todos tendrían exactamente las mismas expectativas, seguramente no se podrían generar oportunidades de tener una perspectiva contraria sobre la evolución del precio de un determinado activo financiero y, seguramente, se perderían esas oportunidades de generar los rendimientos extraordinarios. Rendimientos extraordinarios que para alguien se convierten en pérdidas también extraordinarias.
Pero, ¿qué pasa si existen inversionistas que no tienen mayor conocimiento del mercado o que sencillamente no tienen el tiempo para hacer análisis profundos de mercado? ¿Son inversionistas que están condenados a no poder invertir a través de los mercados financieros?
La verdad es que no y para ello el propio mercado ha creado mecanismos de inversión a través de estructuras que se conocen como inversión de gestión pasiva, que no son más que fondos de inversión o productos financieros que siguen de manera fiel la evolución del mercado. Es decir, que realizan lo que la mayoría de los inversionistas conciben y que, por tanto, consiguen los mismos resultados. Lo que significa que, si el mercado estuvo en un periodo alcista se generan rendimientos y que, si el mercado tuvo un periodo de caídas, el inversionista genera pérdidas iguales o muy similares a las que todo el mercado generó.
En definitiva, es un mecanismo de inversión válido, vigente y muy utilizado por inversionistas de todo el mundo, sobre todo aquellos con un perfil conservador y que prefieren ahorrarse los costos de asesoría financiera para la toma de decisiones de inversión a través de los mercados financieros. A través de estos mecanismo no hay manera de ganarle al mercado y generar rendimientos financieros por fuera de la propia evolución del mercado.