Realizar un pedido de comida en un restaurante a través de chatbot (un sofware inteligente) o mejorar la producción ganadera con el sistema de “vacas conectadas” –que consiste en colocar un dispositivo en la pierna del animal para determinar, por ejemplo, factores para su inseminación– son algunas de las soluciones que ofrece la inteligencia artificial.

Desde la actividad más sencilla hasta la más complicada, aplicadas a esta tecnología, fueron expuestas durante la jornada de conferencias del evento AI + Tour que realizó en octubre pasado en Lima (Perú) la empresa Microsoft.

Desmitificar la inteligencia artificial de lo que es la ciencia ficción y democratizarla para que llegue a todos y de distintas maneras son parte de los objetivos de Microsoft en esta gira por Latinoamérica que inició el 17 de octubre pasado en México y que incluye además México, Panamá, Colombia, Chile, Argentina y Puerto Rico.

Juan Carlos Cisneros, director comercial para el segmento corporativo de Ecuador, Perú, Bolivia, Uruguay y Paraguay, resume lo que es inteligencia artificial: “Es la manera en que el ser humano puede interactuar de manera natural con la capacidad digital”, dice.

Cisneros, que también es gerente general de Microsoft Ecuador, señala que en la región hay países, que desde el lado del Gobierno, están tomando más ventajas mientras otros lo han hecho desde las empresas y agrega que hoy se está viviendo una disrupción. 

Cuarta revolución industrial

Gabriela Gallardo, gerenta general de Microsoft región sur, añade que la disrupción en esta era está marcada por la AI (inteligencia artificial) y la idea es que no se quede en un “pedacito” de la sociedad.

El Centro de Implementación de Políticas Públicas para el Crecimiento y la Equidad) realizó el estudio ‘Inteligencia artificial y crecimiento económico: oportunidades y desafíos para Perú’ que fue expuesto por Ramiro Albrieu, investigador de desarrollo económico de ese centro.

Se indagó en las economías de México, Brasil, Argentina, Chile, Colombia y Perú para realizar proyecciones de crecimiento.

Albrieu dice que en el sector empresarial se vive una cuarta revolución industrial, en la que los cambios tecnológicos se dan mucho más rápido y más fáciles de adaptar que en el pasado.

Entre las desventajas señala que los niveles de absorción de AI en las empresas en Perú son relativamente bajos con respecto de la región por diversos factores.

Entre las ventajas destaca la demografía, pues casi la mitad de la población son nativos digitales, facilitando la readaptación de habilidades para preparar a trabajadores para una nueva economía.