La gerente del Banco Central del Ecuador (BCE) conversó con EXPRESO sobre cómo cerrará el año la economía del país y cuál será la proyección para 2019. La funcionaria también habló sobre las cifras del Producto Interno Bruto (PIB) que la entidad presentó a finales del mes pasado.

- ¿Por qué el BCE no ha presentado todavía la proyección actualizada del crecimiento económico de 2018 y 2019?

- Necesitamos insumos de diferentes instituciones como el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). El retraso que ha habido en la publicación se debe al retraso que han tenido estas instituciones. Por ejemplo, Petroecuador, que tiene que presentar datos, no lo hizo en los tiempos acordados. El MEF todavía tiene algunos pendientes, que esperamos que entre mañana y el viernes se subsanen.

- ¿Para cuándo estarán listas las previsiones?

- Una vez que el MEF nos entregue todos los insumos, esperaremos una semana. Espero que esta semana el ministerio complete la información para entregarla la próxima semana.

- La economía se desacelera. ¿Cuál es el factor principal?

- El mayor factor que hemos visto de esta desaceleración es la inversión pública. Esa reducción nosotros estábamos esperando que se compense con la inversión privada. Pero nosotros estamos conscientes de que la inversión privada llega más lentamente que la pública. Tienen que ver muchos factores, como el tema de confianza. Tal vez este año no lleguen en las cantidades que esperamos, pero a partir de enero estamos seguros de que van a llegar.

- Su última proyección señalaba que la economía crecería 2 % en 2018. ¿La actualización será una cifra inferior?

- Sí, porque esa era en otra coyuntura. Si analizamos el crecimiento en el primer semestre del año es de alrededor del 1,3 %. Si más o menos seguimos esa tendencia esperaríamos cerrar el año con un crecimiento del 1,9 % o 1,8 %.

- El Banco Mundial y el FMI estiman cifras menores: 1,5 % y 1,1 %, respectivamente.

- Pongo el beneficio de la duda. Los organismos multilaterales nunca le han acertado. En 2017, me parece, el FMI esperaba un decrecimiento y crecimos. Esos organismos no tienen las fuentes de información que tenemos nosotros en el país. Lo que sí es rescatable es que ellos también están viendo una ralentización de la economía.

- ¿En qué basa que la economía crecerá 1,9 % o 1,8 %?

- Siempre en el último trimestre se aceleran mucho las compras, sobre todo en noviembre y diciembre. Ese 1,9 % y 1,8 % es una proyección muy básica. No tenemos el dato oficial.

- La baja Reserva Internacional es uno de los problemas que preocupan a los mercados. ¿Qué están haciendo al respecto?

- Para reservas estamos trabajando muchísimo de la mano con el MEF. Incluso yo personalmente tengo conversaciones y reportes diarios porque es un tema que causa preocupación nacional e internacional. A veces hay un umbral cuando causa más preocupación: si está bajo los 2.400 millones de dólares. Hemos sido muy transparentes y definitivamente necesitamos endeudarnos en este último trimestre para compensar la caída de las reservas.

- ¿Se analiza alguna restricción a las importaciones para detener la salida de divisas?

- Ninguna restricción a las importaciones. Justamente hemos tenido reuniones con el ministro de Finanzas. Particularmente, yo no soy partidaria de poner una restricción a las importaciones porque eso sería como darle a un niño una Bebetina para que le cure la fiebre. Hay que cambiar estructuralmente la economía

- ¿Se analiza una nueva operación que incluya oro de las reservas para conseguir crédito?

- El tema de las operaciones de financiamiento lo lleva el MEF. Si habría una operación parecida a la de Goldman Sachs, lo desconozco. En lo que compete al oro, no tenemos hasta el cierre de este año ninguna operación en carpeta. Sin embargo, no es una opción que nos desagrada. Invertir el oro es una potestad que tenemos como BCE.